Definitivamente el equipo Cardenales de Lara demostró en la recién finalizada temporada del Beisbol Profesional de Venezuela, que el famoso dicho el cual señala que «Barquisimeto es un pueblo grande», debe quedarse en el pasado, y que la actitud asumida por toda la organización, léase bien, TODA, demostró que para ellos en este momento, su estructura y determinación está por encima de cualquier especulación.

Consideramos que aquellos mitos que durante muchos años cobijaron a esta institución deben ser cortado de raíz. Ya esos cuentos de la supuesta taquilla, de criticar a los manager porque pierden un juego sin conocer o analizar los motivos, plenar las gradas luego del tercer inning, criticar a los jugadores asumiendo que no tienen bolas o no le ponen corazón, señalar que a la familia Oropeza no les interesa la fanaticada, incluso, estar más pendientes de lo que hacen Caracas o Magallanes, entre otros comentarios que se escuchan en los pasillos de beisbol en la entidad, deben desaparecer, y el fanático Cardenal debe entender que durante esta zafra, los Pájaros Rojo, demostraron con hechos que todo lo que se dice, no tiene nada que ver con la realidad, por lo menos con la actual.

Organización

Conversábamos con un amigo del fútbol, quien tuvo la oportunidad de asistir al sexto y último juego de la gran final, y nos comentaba, que le agradó mucho la forma como los entrevistados luego de lograr el título, hablaban de «organización», y que nunca utilizaban el termino club, divisa o equipo, como etiqueta para denotar el trabajo en conjunto.

Para nadie es un secreto que el fútbol es nuestro deporte preferido, pudiéramos decir que es nuestro modus vivendi en materia comunicacional, sin embargo, no podemos estar ajenos a estas realidades que arropan al gentilicio guaro, más aun, cuando logros como los obtenidos el domingo 26 de enero por los Cardenales de Lara, dignifican nuestra profesión, y en especial, la fuente deportiva.

Durante esa corta tertulia, esta persona nos preguntaba ¿Qué le hace falta al fútbol de Lara para llegar a esto?. Y la respuesta fue expresada anteriormente por el mismo interlocutor, ORGANIZACIÓN.

Hace unos días fuimos invitados a una reunión donde el ciudadano Gobernador Adolfo Pereira, conversó con los representantes de las diversas asociaciones deportivas de la entidad, y durante un derecho de palabra, pudimos reconocer la diferencia entre las criticas que su gestión deportiva recibió por la actuación del estado Lara en los Juegos Deportivos Nacionales Juveniles del 2022, y la aprobada valoración que obtuvo en la cita polideportiva durante el 2024, es decir, más allá del contexto sociopolítico, de las diferencias que pudieran existir entre los dirigentes y el gobierno regional, y todos las debilidades y problemas existentes en el deporte federado, es imposible dejar de reconocer que el crecimiento durante esos dos años fue significativo, o como dicen ahora, exponencial.

Lo mismo sucedió con los Cardenales de Lara, para nadie es un secreto que el crecimiento entre la final pasada y está fue extraordinario, incluso, reconocido por el propio estratega Henrry Blanco, al señalar que «gracias a la crítica nos fortalecimos».

Espaldarazo

El antagonismo se puso de manifiesto en apenas 26 días del presente año, por un lado los Cardenales de Lara logran el título que el pasado año les fue esquivo, y por el otro, el sueño de tener un equipo de primera división en la Liga Futve se esfumó, aunque siendo sincero, siempre estuvimos claros que esa idea de volver a primera sin jugar segunda división, y de la noche a la mañana, era una forma utópica para intentar vender un intangible.

No podemos negar que tenemos entre ceja y ceja esas declaraciones emanadas por el nuevo presidente del Deportivo Lara, José Antonio Quintero, quien de forma muy reiterada señalaba que «la decisión estaba en manos de la Liga Futve», algo que nos hacía pensar que su deseo era jugar la primera división, no obstante, al dejar esa «responsabilidad» en manos de los clubes pertenecientes a la Liga, creíamos, o mejor dicho, creemos, que el plan B, es decir, jugar la segunda división, siempre estuvo en el tapete para no llamarle posibilidad, y que se aceptaría la decisión de la junta de propietarios de equipos, más allá de no lograr un pase a la división de oro, con una willd card o tarjeta de invitación.

«Lo volvieron a jod…»

«lo más triste de todo es que volvieron a jod*** al Gobernador». Fueron las palabras emanadas por varios conocidos del fútbol, quienes reconocieron el esfuerzo y valor mostrado por el ciudadano Gobernador del estado Lara, a colocar su imagen durante la estafa gestada por Kalil Yousef, gesto aplaudido por ser el garante de las políticas de la región, y en esta oportunidad, por volver a la escena, durante los días de incertidumbre generados por el supuesto ingreso del Deportivo Lara a la primera división.

Ante esta realidad, tuvimos que clarificar que la situación actual es totalmente diferente a lo sucedido en el 2022, y será mucho más, si José Antonio Quintero y su grupo de inversionistas, asumen el reto y la responsabilidad para jugar la segunda división de Venezuela, e intentar llegar a la primera división bajo un envión deportivo, y no a la espera de comprar un cupo, o que le permitan ingresar a esa categoría, «sin haber pasado por go». Estamos seguros que si los nuevos inversionistas y la junta directiva, asumen este reto para avanzar desde la cancha, tanto el gobernador como las demás fuerzas vivas de la región, no sentirán ese golpe que muchos hinchas han sentido, más aun, cuando siempre se vendió la idea de «respetar la decisión de los miembros de la Liga Futve»

Señales que hablan

Alguien nos preguntaba, ¿Y por qué el equipo no sale en segunda división?.

Desde este espacio hemos mantenido la tesis de que la mejor forma para llegar a la primera división en Venezuela, es de forma deportiva. Desconocemos si ese mensaje emanado por el presidente del Deportivo Lara, sobre la decisión de la Liga Futve, iba a ser aceptado desde todos los ángulos, es decir, si se jugaba en primera era un excelente regalo, o en tal caso, de no poder jugarse por lo ya expuesto por la propia Liga, se acepta el plan B para jugar la segunda y subir de forma deportiva.

Solo el tiempo será el encargado para demostrar si las intenciones de los nuevos inversionistas del equipo larense realmente eran volver a darle a la entidad un equipo de fútbol profesional, o simplemente era un capricho disimulado en querer jugar la Liga Futve 1 a como de lugar.

Tuvimos la oportunidad de conversar brevemente con José Antonio Quintero, en el estadio Metropolitano de Cabudare, más que una tertulia fue un simple saludo a la bandera, y aunque manifestó reconocimiento a nuestra labor comunicacional, no dudó en considerar que nuestra posición sobre el tema relacionado con el equipo que él hoy representa, es dura y poco amigable, situación que la vemos con gran normalidad, más aun, cuando las puertas del dialogo, y la comunicación interpersonal está totalmente cerrada, aclarando que desde este lado siempre hemos estado abierto para establecer un feed back de altura, aunque lamentablemente el mensaje siempre se queda colgado en el aire.

¡Como un hijo!

«Aunque adoptar un hijo es una obra de amor, tener un hijo sobrepasa todo lo que este texto pudiera representar«. Y vaya forma de calar esta frase con lo que observamos en los pasillos del futbol del estado Lara, entendiendo que si bien iba a ser de suma importancia jugar la primera división gracias a un will cards otorgado por los socios de la La Futve, algo que no se logró, no es menos valioso construir una estructura con mayor identidad, con raíces propias, y con méritos tangibles, para soñar con el revivir del fútbol rentado crepuscular, como si se tratara del nacimiento de un nuevo hijo deportivo para la región.

Por el momento, en manos de Quintero y los inversionistas está esa gran posibilidad de volver a ruedo futbolístico, en sus decisiones está el demostrar que si existen ganas y respeto a la sentencia emanada por los dueños de quipos de primera, y lo más importante, en sus actos estará la mejor demostración de amor e identidad por este noble pueblo larense.

DESDE ESTA TRIBUNA FELICITAMOS A LOS CARDENALES DE LARA POR ESE GRAN LOGRO AL OBTENER EL TÍTULO EN LA TEMPORADA 24-25, Y LOS PASOS AGIGANTADOS PARA PODER ROMPER DIVERSOS PARADIGMAS. ¡EN LA CANCHA O EN EL TERRENO ES DONDE SE DEBE DEMOSTRAR EL VALOR Y ENTREGA DE UNA ORGANIZACIÓN DEPORTIVA!

Por Luis Alonzo Paz | CNP 10.760