Bucaramanga (Colombia), 17 jun (EFE).- Miles de aficionados dieron este domingo en Bucaramanga, capital del departamento colombiano de Santander, una apoteósica bienvenida al equipo de fútbol la ciudad que el sábado se coronó en Bogotá campeón de la liga profesional por primera vez en 75 años.
En un emocionante partido de vuelta que se alargó hasta los penaltis, Atlético Bucaramanga le ganó 6-5 a Santa Fe en la tanda de tiros desde los doce pasos, luego del empate global 3-3.
Para los seguidores del Leopardo, vestidos de verde y amarillo, el título es una hazaña épica y por eso colmaron la carretera que conduce del aeropuerto a la ciudad.
También por eso elevan a la categoría de héroes a los integrantes del equipo, en especial al técnico venezolano Rafael Dudamel y al arquero Aldair Quintana, que anoche atajó el disparo de Agustín Rodríguez y luego el definitivo de Julián Millán, con lo cual dieron rienda suelta al grito de campeón.
A partir de ese momento comenzó la celebración de los santandereanos, que siguió de largo y continúo hoy en el estadio Américo Montanini, antes conocido como Alfonso López, que se llenó hasta las banderas con más de 25.000 almas que rindieron honores a los suyos.
En el avión que trajo al equipo campeón desde Bogotá y que fue recibido con un arco de agua hecho por los bomberos del aeropuerto Palonegro, hubo celebración a ritmo de cumbias, mientras que el técnico Dudamel levantaba el trofeo que los acredita como campeones.
Entrada triunfal en carro de bomberos
La confianza en el equipo se evidenció cuando el alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, le dio las llaves de la ciudad a Dudamel antes de que se clasificara a la final.
«La estrella que faltaba en el firmamento ya está en Bucaramanga.¡Llegaron nuestros campeones! Vamos a festejar porque nos lo merecemos», escribió hoy en su cuenta de X el mandatario
Además del título, Bucaramanga se convirtió en el primer equipo colombiano que logra el cupo a la Copa Libertadores de 2025. La primera vez que los Leopardos estuvieron en ese torneo fue en 1998, por haber quedado subcampeones de la liga 96/97 y llegó a octavos de final.
Nada más aterrizó el vuelo en el Palonegro la gente vitoreó a sus jugadores y comenzó un caravana de automóviles, motos y bicicletas que terminó en las afueras del Américo Montanini, fortín de los búcaros, todo en medio de un río humano que por momentos no dejaba avanzar al carro de bomberos que, escoltado por la Policía, intentaba abrirse paso entre la multitud llevando al equipo y su trofeo.
Montanini, que nació en Argentina y luego se nacionalizó colombiano, fue goleador de la liga colombiana en 1958, año en el que con el Atlético Bucaramanga marcó 38 goles con lo que se convirtió en ídolo del equipo. El delantero murió en Bucaramanga en noviembre del año pasado.
A lo largo del recorrido de casi ocho kilómetros entre el aeropuerto y el estadio, la gente izó banderas del departamento de Santander y del equipo entre vivas y el ruido de cornetas.
Desde el carro de bomberos los jugadores correspondieron a sus hinchas levantando la mano y la copa, ese trofeo que demoró 75 años para llegar a la vitrina del equipo.
En el estadio
Ya entrada la tarde, los jugadores llegaron al estadio en el que la afición, como lo hizo a lo largo del campeonato, copó las tribunas entonando cánticos de alegría por tener al equipo campeón.
Para unos, Quintana fue «el mejor», Fredy Hinestroza estuvo como el mejor «guerrero», Daniel Mosquera fue «imparable en el ataque» y Dudamel es el «mejor técnico que ha tenido el equipo».
Tampoco olvidaron a Juan Camilo Mosquera, Jefferson Mena, Carlos Romaña, Carlos Henao, Santiago Jiménez, Fabry Castro, Jean Colorado y, por supuesto, al argentino Fabián Sambueza, que se «pasó de calidad».
No faltaron los discursos, entre ellos el del alcalde Beltrán, que decretó que este lunes sea día cívico en la ciudad para que sus habitantes sigan celebrando el primer título de campeón del Atlético Bucaramanga.
Para la afición quedaron atrás los tres descensos del equipo a la Primera B, una división a la que nunca piensan regresar, y menos después del título que acaba darles la primera estrella en su escudo.
Rafael Dudamel, el venezolano que le da la primera estrella al Atlético Bucaramanga
El venezolano Rafael Dudamel quedará en la historia del fútbol colombiano al ser el entrenador que le dio la primera estrella de la liga local al Atlético Bucaramanga, un equipo que confeccionó con la fe del carbonero de que podía llegar a lo más alto del firmamento futbolístico.
Y es que Dudamel, de 51 años, se las arregló con un equipo de obreros para dejar atrás 75 de espera para gritar campeón y con ello pegar a su escudo la primera estrella y llevar a su vitrina por primera vez la copa con la que premian al ganador de la liga en Colombia.
Fue un campeonato sufrido, luchado hasta el último momento y que este sábado se definió en la tanda de penaltis porque en el global los equipos quedaron igualados 3-3, tras el 3-2 de vuelta y el 1-0 de ida.
En esa suerte los Búcaros marcaron seis de sus siete cobros, en tanto que Santa Fe acertó cinco y erró dos.
Dudamel, que nació el 7 de enero de 1973 en San Felipe (Venezuela), arribó a Bucaramanga en diciembre de 2023 para recibir al Leopardo, que pasaba por otra época de vacas flacas en cuanto a resultados.
Pese a que en ese entonces del equipo salieron 16 jugadores puso manos a la obra y comenzó a reclutar jugadores que se acomodaban a lo que tenía en mente.
Así llegaron el arquero Aldair Quintana y el argentino Fabián Sambueza, un fino volante con vocación de ataque que le resolvió muchos partidos al equipo.
Ayudado por su asistente técnico, el también venezolano Marcos Mathias, diseñó un inusual esquema de cinco defensas, dos volantes de marca y dos creativos que alimentaban a un único punta. Es lo que se conoce como un 5-2-2-1, pero que podía variar según las necesidades de cada partido.
Otros artífices del título fueron Jéfferson Mena, líder y capitán del equipo; Freddy Hinestroza y Fabry Castro.
Por el equipo Leopardo pasaron en otras décadas finos jugadores como los argentinos Américo Montanini, Miguel Oswaldo González y Jorge Ramoa, al igual que los colombianos Hermán ‘Cuca’ Aceros y Misael ‘El Papo’ Flórez, entre otros.
Alcaldía decreta el lunes como día cívico para celebrar el título del Atlético Bucaramanga
La Alcaldía de Bucaramanga decretó este lunes día cívico en esa ciudad colombiana para que sus habitantes puedan celebrar el primer título de campeón de fútbol del Atlético Bucaramanga, club que el sábado derrotó 6-5 en la tanda de penaltis a Independiente Santa Fe, luego del empate global 3-3.
El decreto, que lleva la firma de Gildardo Rayo, secretario del interior de Bucaramanga en calidad de alcalde encargado, precisa que la determinación se da «a efectos de la celebración y conmemoración de la obtención del primer título del equipo profesional de fútbol de Bucaramanga».
Los dirigidos por el venezolano Rafael Dudamel lograron colgar en su escudo la primera estrella en sus 75 años de historia, no sin antes vivir un sufrimiento que se transformó en júbilo.
No era para menos. Tras ganar en casa 1-0 y perder en Bogotá 3-2, todo se definió desde los doce pasos y ahí, el cuadro Leopardo ganó 6-5 para quedarse con el trofeo.
El decreto precisa que se exceptúan del día cívico los servidores públicos que, «en razón de sus funciones, deban cumplir horarios y turnos especiales de trabajo en forma permanente».
El decreto del día cívico había sido anunciado el pasado jueves por el alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, quien dijo que se haría efectivo solo si el Atlético Bucaramanga quedaba campeón.
EL alcalde se trasladó ayer a Bogotá para asistir a la final de la liga en el estadio Nemesio Camacho ‘El Campín’, donde también estuvieron el alcalde bogotano, Carlos Fernando Galán, hincha del santa Fe, y Juvenal Díaz, gobernador del departamento de Santander, del cual es capital Bucaramanga.
Buena parte de los colombianos estuvieron de corazón con la escuadra santandereana, un equipo armado sin grandes estrellas pero que con trabajo y disciplina logró llevarse el inédito título que ahora lucirá en su camiseta y en su vitrina.
En la serie de penaltis, por el Bucaramanga anotaron Daniel Mosquera, Carlos Henao, Joider Micolta, Jefferson Mena, Aldair Zárate y Fabry Castro y erró el venezolano Leonardo Flores.
Por Santa Fe convirtieron Francisco Chaverra, el argentino Marcelo Ortiz, Elvis Perlaza, Hugo Rodallega y Juan Pablo Zuluaga y fallaron el uruguayo Agustín Rodríguez y Julián Millán.
Luego del cobro de Millán, que le significó el título al Bucaramanga, comenzó una noche de celebración en la que las calles de Santander se tiñeron de amarillo, con caravanas de motociclistas y automovilistas, espectáculos pirotécnicos y música hasta entrada la madrugada de este domingo.